Una de las grandes escenas de mi adolescencia, que siempre que la recuerdo me roba una sonrisa. Para estas cosas, aunque adore la comedia romántica, soy un poco vinagre, y odio las cursilerías, pero esto hace que se derrita cualquiera.
Aparte, utilizaré este momento como un pequeño homenaje a Heath Ledger, que murió hace algo más de dos años. Esta declaración de las escaleras, mientras vacila a los guardias, sus hazañas como caballero, su gran historia de amor cowboy o su tentativa a la suerte como Joker. Uno de los grandes actores de la historia del cine. Y todo, a causa de una mezcla explosiva de benzodiacepinas y derivados opiáceos permitieron que un 22 de enero, no pudiéramos despedirnos debidamente de él.
Para quien la prefiera en Versión Original, aunque a mi me gusta más la versión en castellano, me parece que tiene un cierto rintintín intrínseco, más chapuza, y más espontaneo.
¡Feliz comienzo de semana!
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